Hernández: “Disfruté mucho del TC, me dio todo”
Walter Hernández irrumpió a lo grande en el Turismo Carretera, logrando el título en su temporada presentación. En esta nota actual con SoloTC, rememora su paso por la “máxima” y sugiere cambios para lograr mejores carreras.
Walter Hernández vivió todos los estados en el Turismo Carretera. El de Comandante Nicanor Otamendi sorprendió en su presentación, rápidamente saboreó el gusto del título y se plantó ante la ACTC para dejar de correr en la ruta. Completó un centenar de carreras en la categoría y dejó su huella. Walter repasó junto a SoloTC su paso por el TC con una mirada actual.
Con la lluvia como inseparable compañía, el domingo 7 de agosto de 1994, Hernández logró su 6º y último triunfo en el TC. “Fue un carrerón abajo del agua. Me gustaba mucho manejar con lluvia, y Río Cuarto era un circuito que me caía bien, aunque ese día estaba bastante complicado por esa condición”, rememora junto con SoloTC su último festejo en la “máxima”.
Con el “1” en los laterales de su Ford, Hernández iba camino a repetir la corona obtenida en 1993. Luego de aquel triunfo en el Imperio del Sur, el 4º en 8 fechas, aventajaba por 38 a Emilio Satriano, su escolta tanto en la prueba cordobesa como en el campeonato. Sin embargo, todo se precipitó.
El circuito semipermanente “Jorge Martínez Boero” de Bolívar fue el escenario de la 11ª fecha del año, la primera en disputarse en la ruta tras el fatal accidente de Osvaldo Morresi el 27 de marzo en La Plata. Hernández, testigo directo del impacto del Pato porque era el 2º en esa carrera, determinó no presentarse por estar en contra de seguir corriendo fuera de los autódromos.
“Los autos eran cada vez más rápidos y un error o una rotura costaba tener un accidente grave. No había necesidad de seguir corriendo en la ruta. Por esa decisión perdí un campeonato, pero prioricé otras cosas que tienen mucho más valor”, reflexiona Walter, quien por dicha situación fue suspendido por 1 fecha, la 14ª disputada en Campo de Mayo, y sus posibilidades de revalidar el cetro se esfumaron.
El ansiado debut en el TC
El 5 de julio de 1992, en Buenos Aires, Hernández debutó en el Turismo Carretera. Y lo hizo con un destacado 5º lugar con su Dodge en la Final, la cual ganó uno de sus ídolos, Roberto Mouras (Chevrolet). Luego de aquella cita debió esperar 3 carreras para volver a subirse a un TC.
Tras accidentarse en Balcarce y fracturarse un pie, Satriano decide poner en alquiler su Chevrolet y Walter lo corre. Nuevamente se destaca. Clasifica 2º, gana la 2ª serie pero luego se despista en la Final, disputada en 9 de Julio, cuando lideraba.
Para 1993 llegó el turno de correr, de la mano de Jorge Trepat, con Ford y alcanzar su gloria deportiva. “Disfruté mucho del TC, me dio todo. Me hubiese gustado seguir corriendo, pero no tuve la oportunidad. Mi paso fue algo muy fugaz, donde obtuve muy buenos resultados en muy poco tiempo”, asegura el otamendino, que obtuvo su debut triunfal el 27 de junio de 1993, en La Plata y el título el 19 de diciembre de ese año.
Por aquellos tiempos, la categoría vivía tiempos de transformaciones. “El nivel del TC siempre fue muy bueno, pero a partir de esa época fue un antes y un después, todos se empezaron a profesionalizar”, rememora Hernández quien pese a no haber corrido en la 1ª fecha (no se llegó con el armado del auto), se consagró campeón en su 1ª temporada en la categoría.
Cómo lograr que salgan mejores carreras
Aunque no siguió vinculado a la categoría, el bonaerense continúa ligado al TC como fiel espectador. Precisamente, por su experiencia y consultado sobre cómo lograr mejores carreras, se permite hacer una sugerencia para que las competencias vuelvan a ser tener sobrepasos.
“Para mí los autos de TC tendrían que ser como lo son los de NASCAR, que la seguridad vaya por dentro, con el piloto más al centro, y en el exterior sacarle los pontones, achicar las trochas, quitar carga adelante y que los autos vayan más rápido. Seguirán siendo seguros y podrían agarrar succión y pasarse”, concluye Hernández.