2007: el año en el que cambió la fisonomía de los autos de TC
El 9 de septiembre de 2007 los autos de Turismo Carretera estrenaron los pontones laterales. Formó parte de un paquete de medidas que aplicó la ACTC para mejorar la seguridad luego de la trágica muerte de Guillermo Castellanos.
El trágico accidente de Guillermo Castellanos durante una carrera en Comodoro Rivadavia en 2007, fue el disparador de una serie de medidas que aplicó la ACTC para mejorar la seguridad de los pilotos y los autos. La acción inmediata fue bajar a los copilotos. La siguiente, colocar pontones laterales.
El proyecto de implementación de las defensas laterales había surgido en 2006 después del trágico accidente de Alberto Noya y su acompañante Gabriel Miller en una carrera de TC Pista en Rafaela. Pero se concretó casi 1 año y medio más tarde.
Los autos de la “máxima” estrenaron los pontones en forma obligatoria en la 12ª fecha del torneo 2007 disputada el 9 de septiembre en el autódromo de 9 de Julio, en una carrera que ganó Juan Manuel Silva (Ford). Desde ese día, la fisonomía de los autos de la “máxima” cambió para siempre.
La Técnica de la ACTC, en ese entonces dirigida por el ingeniero Alejandro Solga, estableció los parámetros de la nueva defensa tubular recubierta con pontones de fibra de carbono compuesta de resinas ignífugas. Esto permitió alejar al piloto a 45 centímetros de la zona de impacto, cuando antes estaba a apenas a 15 centímetros.
Y, a su vez, evitar que elementos externos invadan el interior del vehículo como había ocurrido en el accidente de Castellanos. Años después, se colocó en su interior un colchón de componentes deformables de kevlar y poliuretano expandido para incrementar el poder de absorción ante un golpe.
“Después de analizar el auto de Castellanos vi la necesidad de implementar urgente las protecciones y, en menos de 1mes desarrolle el concepto y la maqueta. Fui a la casa de Oscar Aventin (presidente de la ACTC en ese entonces) a mostrar el concepto y me dijo: ‘Para Rafaela (3 meses) todos los autos de TC y TCPista tienen que tenerlo incorporado’. No llegamos a esa carrera pero si para la de 9 de Julio”, contó Solga.
Si bien en un principio este nuevo sistema de seguridad fue resistido por el cambio estético y la incidencia en la performance que generó en los autos, con el paso del tiempo se comprobó su efectividad a la hora de atenuar las consecuencias ante un accidente. Es por eso que en los años siguientes, comenzaron a implementarse en el TC Pista, TC Mouras y TC Pista Mouras.
Este fue el puntapié inicial de un paquete de medidas para mejorar la seguridad en los coches. Desde entonces, la ACTC puso bastante énfasis en este tema con la implementación de estructuras tubulares de nueva generación, canalizador delantero para absorber la energía de un golpe, utilización del sistema SIF, homologación de butacas, cascos e indumentaria, sistema rebatible de la palanca de cambio y el protector del cardán, entre alguna de las medidas más significativas.