Qué le falta al Toyota Camry de nueva generación para ser competitivo
El Toyota Camry de nueva generación tuvo un inicio de temporada complicado en el Turismo Carretera, en el que se mostró lejos de los puestos de punta.
Cristian Kissling, ingeniero del Toyota Gazoo Racing, le explicó a SoloTC los motivos por los que al Camry de nueva generación le costó ser competitivo en las 2 primeras fechas del Turismo Carretera. La falta de velocidad final y cuestiones aerodinámicas, las principales razones. Cómo trabaja el equipo para remediar estas falencias.
“Analizo el desarrollo del Camry en 3 etapas. Una fue la prueba en La Plata, que fue muy buena y en la que el auto funcionó muy bien en una pista en la que se necesita más carga que velocidad y en la que se dobla bastante. Después fuimos a El Calafate, donde terminamos clasificando a 6 décimas. Tuvimos un buen rendimiento, no óptimo y que pudo ser mejor. Pero en Viedma nos costó un poquito más y no estuvimos bien. Nos sigue faltando velocidad final y eso se traslada a todas las rectas y aceleraciones”, le explicó Kissling a SoloTC.
El debut del flamante Toyota en El Calafate fue con un 16° puesto en clasificación a 0s683 del tiempo de la pole, un 4° lugar en la serie y un abandono en la Final. En Viedma, Andy Jakos no pudo clasificar por un problema con el motor, quedó 14° en su serie y 16° en la carrera.
Enseguida, el ingeniero remarcó que, como ocurría con el Camry de vieja generación, el de la nueva pena con la velocidad final. “En El Calafate, que es una de las rectas más largas, perdíamos entre 7 y 8 km/h con respecto a los otros autos y llegábamos a la velocidad de un TC Pista. De los nueva generación se están viendo autos con muy buena velocidad como los Mustang, mientras que los Camaro están un poquito faltos de velocidad y nosotros un poco más aún. Eso se nota en la pista”, aseveró a SoloTC.
Por eso, manifestó que se está trabajando fuerte en el motor del auto de Andy Jakos, que desde esta fecha en Neuquén será atendido por Claudio Garófalo. “Si bien sabemos que el auto no es rápido por derecho por un tema aerodinámico y por su volumen, también sabemos que tenemos que estar óptimos con los motores para poder ver realmente dónde estamos parados. Estamos con buenas expectativas para Neuquén”, señaló a SoloTC.
La carga trasera, un tema por resolver
“El balance aerodinámico es bueno, pero si lo comparamos con el auto de vieja generación nos falta un poco de carga trasera. Para compensar eso necesitamos tener el alerón trasero en una posición que nos dé esa carga que necesitamos para funcionar bien, equilibrados y poder conseguir una velocidad final mejor. Nos falta encontrar ese equilibrio para lograr un mejor funcionamiento en pista”, le explicó Kissling a SoloTC sobre la cuestión aerodinámica que necesitan resolver en el Camry.
Sobre la falta de carga en el tren trasero, Cristian explicó cómo se puede mejorar en ese aspecto. “Esa falta de carga en el tren trasero genera drag al tratar de conseguirla con un alerón en ángulos mayores. También se vio en varios autos de nueva generación el uso de un gurney, que también está permitido y que mejora esa cuestión”, señaló a SoloTC.
El tamaño de la trompa, otro factor que afecta al Camry
Otro de los aspectos que complican el rendimiento del Camry es la trompa original, una de las características distintivas de los huevos prototipos, que ofrece una mayor resistencia con respecto a las que usan los autos de vieja generación.
“Son bastante voluminosos con respecto a los autos viejos, sobre todo en lo que es el ancho y el alto de las trompas. También, el tener la toma de aire en el interior consume algunos caballos de potencia porque el aire no entra limpio, se calienta e ingresa por un ducto que está restringido. Por eso consume un poco más de potencia con respecto a los autos de vieja generación. Esto nos está jugando un poco en contra”, concluyó con SoloTC.