Los Landa: herencia de una pasión teceísta
Juan Manuel y Marcos Landa. Abuelo y nieto comparten la pasión por los fierros y un mismo destino: el Turismo Carretera.
Para quienes no conocen su historia, Juan Manuel Landa (70) fue un férreo defensor de Dodge entre las décadas del ’80 y ’90. Llegó al Turismo Carretera con 33 años y con 119 carreras se dio el gusto de ganar 3 veces y subir 4 veces al podio. Su nombre quedó registrado porque fue el último en ganar con el Slant Six que equipó a los Dodge hasta la llegada de los Cherokee.
El marplatense se retiró a los 44 años el 15 de mayo de 1994 y se dedicó a su negocio de venta de materiales de construcción. Pero el automovilismo le dio revancha a través de su nieto Marcos (18), que en 2019 se consagró campeón del TC Mouras con el Torino del Trotta Racing Team en su torneo debut.
Además, el joven uruguayo se convirtió en el primer extranjero en consagrarse en la divisional de la ACTC. Con el título bajo el brazo, Marcos quedó habilitado a pegar el salto directo al Turismo Carretera. Sin embargo optó por hacer 1 año de experiencia en el TC Pista con el Torino con el que Facundo Ardusso peleó los últimos 3 campeonatos del TC.
Por supuesto que Juan Manuel es su hincha número 1, lo acompaña a todas las carreras desde que debutó en la Fórmula Metropolitana en 2017 (en 2018 fue campeón) y sueña con verlo en el Turismo Carretera lo más pronto posible. “Dios me regaló esto de Marcos, me alargó la vida, como proyecto, como ilusión…”, le cuenta El Gallego a SoloTC.
Con pocas subjetividad, pero con la experiencia de tantos años en el automovilismo, Juan Manuel describe a su nieto como “un piloto distinto, agresivo a la hora de correr, pero que no comete errores, limpio y respetuoso con sus rivales. Pensá que en Uruguay ni siquiera había andado en un auto de calle porque cuando debutó era menor de edad. Sin embargo se subió al Mouras y no pagó derecho de piso”.
Efectivamente, Marcos tuvo una contundencia inusual para un debutante: en 16 carreras sumó 4 victorias, 7 podios y 2 pole position. Ganó el título con 14,5 puntos de ventaja sobre Lucas Panarotti, y se convirtió en el primer extranjero campeón en la órbita de la ACTC. De yapa le dio el primer título a Torino en la categoría.
“Él logró lo que yo no pude alcanzar en más de 10 años de actividad: consagrarse campeón en este tipo de autos. Con Marquitos hablamos mucho de automovilismo. Cuando empezó a correr en la Metropolitana le anoté en un papel qué cosas no tenía que hacer. Una de esas es que no debía pasar autos por afuera, sino amagarles y hacerlo por adentro. Pero en más de una carrera él hizo lo contrario, y me demostró que podía ganar carreras pasando por afuera. Me cerró la boca, y a partir de ahí nunca más le dije nada”, reconoció el expiloto.
Abuelo y nieto están unidos por el amor a los fierros y la velocidad, una muestra de que en la herencia genética también se transfiere la pasión. “Mi sueño como abuelo es verlo en el TC y que él sea campeón, algo que yo no pude lograr”, cerró Juan Manuel que cuenta en su haber con el subcampeonato de Turismo Carretera en 1992.