El 1º triunfo de Gastón Perkins en TC
El Gaucho de Alberdi ingresó a la galería de ganadores del TC el 5 de mayo de 1968, en una carrera que no otorgó puntos, tuvo una largada al viejo estilo de las “24 Horas de Le Mans” y un recorrido de 500 kilómetros. El campeón 1969, que esperó 16 años para ganar en la categoría, venció su resistencia inicial a correr para tratar de reconfortar a su hermano, que estaba internado.
El 5 de mayo de 1968, Gastón Perkins (Liebre I ½ – Tornado) logró su ansiada 1ª victoria en el Turismo Carretera. Fue en los “500 Kilómetros YPF”, que se llevaron a cabo en el autódromo de Buenos Aires. Habían pasado 16 años, 47 carreras y varios sinsabores desde su llegada al TC, lo que lo llevaron a prometer que no correría más.
Sus comienzos -debutó el 20 de julio de 1952 en la Vuelta del Oeste– fueron con Chevrolet, luego se pasó a Ford y hasta llegó a correr con un Renault Gordini. Sin embargo, fue con el arribo de Torino a la “máxima” que logró continuidad, ya que entre 1952 y 1966 sólo había tomado parte de 18 competencias.
En 1967 se convirtió en el primer piloto de TC al que IKA Argentina, a través de su presidente James McCloud, le vendió un Torino. Alistado por su propio equipo, Perkins disputó 24 de las 32 carreras del certamen, terminó 6º en el campeonato y consiguió sus primeros 6 podios.
También fue el primer piloto no oficial de Torino en adjudicarse una prueba de clasificación (en la Vuelta de Arrecifes de 1967), pero la victoria se le negó en su 1º año con la marca. Esa temporada, además de los Toros oficiales de Eduardo Copello, Héctor Gradassi y Jorge Tenrnengo, ganaron los privados de José Manzano, Alberto Rodríguez Larreta y Rubén Luis Di Palma.
La intranquilidad de Perkins
El 5 de mayo el Turismo Carretera disputó la 6ª carrera de la temporada en el circuito Nº 12, que ese día la categoría utilizó por 2ª vez en su historia. Sin embargo, no fue la 6ª fecha del campeonato, ya que los “500 Kilómetros” no otorgaron puntos. Esto se debió a que el Club YPF, organizador de la competencia, decidió alterar el peso mínimo de los autos, por lo que no se aplicó el que establecía el reglamento del TC.
Juan Carlos Perkins, hermano y exacompañante de Gastón, estaba internado y presto a operarse ese fin de semana. Por eso el Gaucho de Alberdi no estaba convencido de correr. “La verdad que no estoy tranquilo. No sé qué pasa con Johnny. Los médicos, que son de mi confianza, no pueden darme el sosiego que necesito”, le dijo, ya en el autódromo, al periodista Alfredo Parga. Finalmente, Gastón accedió a darle el gusto a su hermano. “Se imagina que, si llego a andar bien, lo mío lo puede reconfortar”, explicó.
Tras quedar 10º en la clasificación, Perkins tomó la punta en la largada. Que no fue una más. Se hizo al viejo estilo de las “24 Horas de Le Mans”: los 36 pilotos se ubicaron a unos 20 metros de sus autos, que estaban dispuestos a 45º, y, tras encenderse el semáforo verde, corrieron hacia su coche, lo encendieron y largaron.
Un desarrollo cambiante
El TC corría poco en autódromos en esa época. Y existía cierta desconfianza hacia las carreras que no fueran en ruta. Y más aún si eran tan extensas. No obstante, las crónicas periodísticas coinciden en que el desarrollo fue atrapante.
Además de Perkins, también lideraron Eduardo Rodríguez Canedo (Torino), Nasif Estéfano (Torino), Eduardo Copello (Torino) y Juan Manuel Bordeu (Chevrolet). La pelea de Gastón fue principalmente con el balcarceño y el sanjuanino, que a la postre lo acompañaron en el podio.
Copello y Bordeu tenían autos más veloces que Perkins, pero el piloto de Alberdi tenía a su favor una estrategia de carrera basada en la posibilidad cierta de no necesitar detenerse en los boxes. Algo que sí tenían que hacer sus principales rivales.
Perkins prevalece en la lucha
El punto de inflexión de esa lucha se dio a 23 vueltas del final, cuando Eduardo Copello se detuvo en los boxes para reemplazar el neumático delantero derecho. Pero a raíz de una confusión el piloto oficial de IKA volvió a la pista antes de que se realizara el cambio, por lo que metros después la goma se destruyó.
Ese tiempo perdido (debió efectuar otra parada) le permitió a Perkins -que siempre estuvo entre los 4 primeros– quedar como líder de la competencia con 1m15s de ventaja sobre Bordeu y 1m20s sobre Copello. El sanjuanino fue recortando la diferencia con un ritmo muy veloz pero no le alcanzó para doblegar a Gastón, que lo superó por 3s9.
Contrariamente a lo que podría pensarse, Perkins no estaba exultante por su 1ª victoria en TC. “Puede que esto sirva para que mi hermano se reincorpore al clan. Entiendo que el deporte es amistad. Unión. Qué triste debe ser ganar y quedarse sólo con el éxito. Yo creo que esto de ganar es tan lindo como salir 2º, 3º o 6º y compartir el momento con el triunfador“, le contó a Parga en una auténtica pintura de época.
Gastón Perkins nació el 13 de noviembre de 1928 en la Ciudad de Buenos Aires. El 20 de julio de 1952, a los 24 años debutó en Turismo Carretera con un Chevrolet y fue 10º en la Vuelta del Oeste. Fue campeón en 1969 y obtuvo 5 victorias, todas con Torino. En el TC, donde disputó un total de 96 carreras, también corrió con Chevrolet, Ford y Renault Gordini. Su última participación fue en el GP de la Montaña de 1971, donde abandonó. Murió el 19 de abril de 2006 en Alberdi, provincia de Buenos Aires.